Desearía que estuvieras aquí. Me gustaría estar allí: en la cabaña diseñada por Nikos Valsamakis. En algún lugar de Anavyssos aunque podría ser en Mónaco o Santa Mónica, California. Donde, después de todo, late el corazón del estilo sin pretensiones. Un grupo de amigos responde a la llamada de la anfitriona y llega con Chris Kraft y autos al lugar de encuentro. Podría ser un Porsche, un Shelby, McQueen en carrera. Empieza la fiesta.
Su campaña original Kalogirou Porque la temporada elogia el verano que echamos de menos: la hospitalidad, la fiesta, el despreocupado y los maravillosos zapatos. LA Christos Theologos dirige un clip nostálgico y tan moderno con su ayuda Rene Hebermacher, La Nikos Yfantis bordados en dirección de arte y escenografía y Daphne Iliaki a través del estilo da sustancia a los personajes de esta empresa: su Nadias Serlidou, του Stelios Katopodis, el talentoso bailarín de la lírica, de Victoria Ackerman, της Nastia Gonhar y su Mike Vasilaki. Su maquillaje Giannis Siskou y su cabello Christos Bairampas Completa el resultado. Los pavos reales son las mascotas de una mansión que acoge el reencuentro de amigos que dura un día: desde el tintineo de los zapatos de gatito Prada hasta el cojo con uno Jacquemus petit chiquito bag y un trago en el cobarde escuchando musica en la camioneta.
Esta es la magia del resultado: la película se erige sola como una historia que glorifica el verano, el año que amamos como una eternidad pero que logra vender las colecciones de una manera directa y elegante: los mocasines, los tacones del meridiano, los zapatillas que juegan en las baldosas, las Santo laurent alpargatas que responden al teléfono, bolsos, carteras, el universo de Kalogiros, que en sus 130 años de historia, siempre nos muestra el camino. En el siguiente tono, Elena Nanathanil podría saltar de la siguiente campana y parecer más real que la espada que salta detrás del sofá.
La fiesta terminará. Los amigos se irán y la anfitriona, ahora sola, endosará las postales, dedicando su amor manuscrito a los que estuvieron allí: «Ojalá estuvieras aquí». El sueño, la esperanza, la imaginación, la fantasía se encuentran en este clip de dos minutos. En la terraza de Valsamakis, dentro de nosotros. ¿Cómo nos encontrará este verano? Empieza a enviar postales, la sal marina nutrirá la herida, la convertirá en un poema.
